Tuvimos que esperar en el albergue hasta la una de la mañana que salía el tren. Qué paliza de viaje, en cinco horas nos pidieron el passport!!!!!! Nueve veces!! Dormimos poquísimo claro, pero ya estábamos en Budapest.Echamos a andar hacia el albergue, que está situado en pleno barrio judío. Podemos dejar el equipaje y salimos a ver qué había por la zona, vemos la sinagoga y el monumento que tienen como un arbol con forma de minorá invertida en recuerdo de los judíos húngaros. Marco se había ocupado de leerme la historia de Hungría, especialmente durante la segunda guerra mundial, estamos al día!! El metro es un poco engorroso porque las lineas no se comunican (al menos en la zona que visitamos) así que después de ir hacia el Danubio y la calle Vaci Utca (la calle comercial típica del centro) nos entró un agotamiento que tuvimos que coger un taxi de vuelta. Nada que no se arreglara después de comer y una buena siesta. Por cierto, muy curioso el albergue, cada litera es independiente, se separa con una cortinilla del resto, así que te permite cierta intimidad.Nos llama la atención que todos los edificios por los distintos barrios que vamos viendo, porque todos tienen alguna escultura, o adornos que hacen que quede muy señorial.No he explicado que Budapest se divide en dos zonas, Buda y Pest; hemos estado viendo Pest, concluímos subiendo hacia el Parlamento que seda un aire al de Londres, muy bonito sí señor. Por la noche nos vamos a echar unos dardos y a tomarnos unos gin tonics mientras veiamos un partido de fútbol.No sabemos como enfocar la visita a Buda, nos parece mucha tela para verlo durante la mañana hasta las 16.00. Subimos en metro hacia la zona (atraviesa el río), desde aquí podemos ver el parlamento de lejos, aunque está nublado la vista es preciosa.Paseamos por el bastión de los pescadores y por el palacio real. De ahí a darnos un homenaje en el balneario del monte Gellert, ya no nos dio tiempo a ver la ciudadela pero salimos muy relajaditos del baño, con el tiempo justo para recoger el equipajey coger de nuevo el tren. Nos hizo falta tiempo, Budapest es muy grande y requería más días. Por otro lado, en relación con Praga, mi opinión es que queda por debajo.El tren nos llevaba a Viena, meramente por enlace, para ir directos a Cracovia. Solo teníamos dos horas en Viena y lo que nos pilla cerca es el Belvedere, así que vamos a verlo, está precioso aunque está cerrado y de la parte frontal solo podemos ver un cachito. El viaje nocturno fue horroroso, a las tres de la mañana nos cambiaron de tren cuando era directo y nos hicieron enseñar el billete y el pasaporte otro montón de veces. Moraleja: es el ultimo viaje de noche que hacemos en tren, Marco se ha negado en redondo a dormir más en trenes. Y con razón.
Gracias, funita, y además estás guapíiiiiiiiiisima!!! Tú eres entonces pro-Budapest...mmmmmmm, lo anotaré, porque me apetece visitarlas pero por separado, precisamente porque la gente las compara... besitos Por cierto, qué pasa en el foro? es imposible entrar!!
farmalameda -
Mil gracias por tu crónica, me encanta la foto de Eslovenia, es Bled? Espero, bueno , estoy segura de que el viaje te ha venido de perlas. Ahora preparada para la lucha, mucha mucha suerte.besos para tí Funita y un OLE!! para Marco, del que puedes presumir.
Marta -
Uffff, vaya palizón, pero que cosas tan bonitas habéis visto. Eslovenia tiene que ser maravillosa, me la apunto. Ves que bien te vino este viaje.
MIJA -
FUNA! GUAPA! Que fotos tan bonitas, la de Eslovenia es espectacular! Despues de ver esto y las fotos de Monica, decir solo que CentroEuropa es precioso! Cuenta mas cosas!
Tuvimos que esperar en el albergue hasta la una de la mañana que salía el tren. Qué paliza de viaje, en cinco horas nos pidieron el passport!!!!!! Nueve veces!! Dormimos poquísimo claro, pero ya estábamos en Budapest. Echamos a andar hacia el albergue, que está situado en pleno barrio judío. Podemos dejar el equipaje y salimos a ver qué había por la zona, vemos la sinagoga y el monumento que tienen como un arbol con forma de minorá invertida en recuerdo de los judíos húngaros. Marco se había ocupado de leerme la historia de Hungría, especialmente durante la segunda guerra mundial, estamos al día!! El metro es un poco engorroso porque las lineas no se comunican (al menos en la zona que visitamos) así que después de ir hacia el Danubio y la calle Vaci Utca (la calle comercial típica del centro) nos entró un agotamiento que tuvimos que coger un taxi de vuelta. Nada que no se arreglara después de comer y una buena siesta. Por cierto, muy curioso el albergue, cada litera es independiente, se separa con una cortinilla del resto, así que te permite cierta intimidad. Nos llama la atención que todos los edificios por los distintos barrios que vamos viendo, porque todos tienen alguna escultura, o adornos que hacen que quede muy señorial. No he explicado que Budapest se divide en dos zonas, Buda y Pest; hemos estado viendo Pest, concluímos subiendo hacia el Parlamento que se da un aire al de Londres, muy bonito sí señor. Por la noche nos vamos a echar unos dardos y a tomarnos unos gin tonics mientras veiamos un partido de fútbol. No sabemos como enfocar la visita a Buda, nos parece mucha tela para verlo durante la mañana hasta las 16.00. Subimos en metro hacia la zona (atraviesa el río), desde aquí podemos ver el parlamento de lejos, aunque está nublado la vista es preciosa. Paseamos por el bastión de los pescadores y por el palacio real. De ahí a darnos un homenaje en el balneario del monte Gellert, ya no nos dio tiempo a ver la ciudadela pero salimos muy relajaditos del baño, con el tiempo justo para recoger el equipaje y coger de nuevo el tren. Nos hizo falta tiempo, Budapest es muy grande y requería más días. Por otro lado, en relación con Praga, mi opinión es que queda por debajo. El tren nos llevaba a Viena, meramente por enlace, para ir directos a Cracovia. Solo teníamos dos horas en Viena y lo que nos pilla cerca es el Belvedere, así que vamos a verlo, está precioso aunque está cerrado y de la parte frontal solo podemos ver un cachito. El viaje nocturno fue horroroso, a las tres de la mañana nos cambiaron de tren cuando era directo y nos hicieron enseñar el billete y el pasaporte otro montón de veces. Moraleja: es el ultimo viaje de noche que hacemos en tren, Marco se ha negado en redondo a dormir más en trenes. Y con razón.
4 comentarios
REdonna -
besitos
Por cierto, qué pasa en el foro? es imposible entrar!!
farmalameda -
Espero, bueno , estoy segura de que el viaje te ha venido de perlas.
Ahora preparada para la lucha, mucha mucha suerte.besos para tí Funita y un OLE!! para Marco, del que puedes presumir.
Marta -
Ves que bien te vino este viaje.
MIJA -